El Pan Sagrado

08.09.2015 08:43

1 Samuel 21

 

 

1 VINO David a Nob, al sacerdote Ahimelec; y se sorprendió Ahimelec de su encuentro, y le dijo: ¿Cómo vienes tú solo, y nadie contigo?

Esta ubicación estaría casi a la mitad del camino de Jerusalén a Anatot.  Otros piensan que Nob estaba en el monte de los Olivos.  A Nob fue trasladado el tabernáculo cuando se lo sacó de Silo después de que los filisteos tomaron el arca.  Hasta entonces todavía el arca estaba en casa de Abinadab, en Quiriat-jearim.  Más tarde David llevó el arca a Jerusalén (2 Sam. 6: 2, 3).  Debido a que el arca no estaba en ese tiempo en el tabernáculo, quizá los servicios se realizaban en una forma muy parecida a la empleada en los días de Cristo cuando estaba vacío el lugar santísimo del templo.

Sacerdote. Sin duda el sumo sacerdote a cargo del santuario.  La presencia de los panes de la proposición (ver vers. 6) demuestra que el tabernáculo estaba entonces en Nob (ver PP 711, 712).

 

Se sorprendió. Literalmente, "se estremeció".  La ansiedad y el temor se reflejaban en el rostro de David.  Ahimelec supo que algo andaba completamente mal.

 

 me encomendó.

No hay duda de que David presentó ante Ahimelec un cuadro completamente distorsionado de los hechos.  David estaba en gran peligro.  Había estado tan abrumado por el reciente cariz de los acontecimientos que le resultaba difícil ver las pruebas de ese momento a la luz de las evidencias manifiestas de la forma en que Dios lo llamaba y de, su cuidado protector.  Si huía a donde estaba Samuel, podría poner en peligro la vida de ese hombre venerable.

 

Su problema consistía en hacer preguntas sin dar a Ahimelec un conocimiento verdadero de la situación.  Que el sacerdote consultó por él a Jehová, es evidente por el relato de Doeg a Saúl (cap. 22: 10) y por el reconocimiento implícito de Ahimelec en cuanto a una completa ignorancia de dificultades entre Saúl y su yerno (cap. 22: 14, 15

 

Desde el punto de vista de las normas de los días de David, podría considerarse el disimulo como algo defendible.  Se dice que entre la gente del Cercano Oriente era moneda corriente y todavía lo es en gran medida creer que no era un crimen decir una mentira para salvar una vida.  Los gabaonitas recurrieron a una estratagema tal, y sin embargo les fue perdonada la vida (Jos. 9: 3- 18).  Pero, aunque Dios aceptaba a los hombres mancillados con las costumbres de esos días, trataba de guiarlos a una norma más elevada.  No los rechazaba ni los abandonaba por la práctica ocasional o quizá habitual de las costumbres de ese tiempo.  El plan de Dios era efectuar finalmente una reforma en todos esos asuntos.

 

Aunque David no podía aducir ignorancia por su acto, Dios no lo abandonó.  Quizá hubiera sido mejor que él hubiese ido a Samuel, quien conocía bien todo el asunto.  Dios tenía .

mil formas para superar la dificultad.  Si David le hubiese dicho la verdad a Ahimelec, el sacerdote habría estado prevenido y habría podido escapar.

 

3 Ahora, pues, ¿qué tienes a mano?  Dame cinco panes, o lo que tengas.4 El sacerdote respondió a David y dijo: No tengo pan común a la mano, solamente tengo pan sagrado; pero lo daré si los criados se han guardado a lo menos de mujeres.

 

Pan sagrado. Cada sábado se reemplazaban las 12 tortas del pan de la proposición.  De acuerdo con las disposiciones levíticas, el pan viejo debía ser comido únicamente por los sacerdotes y tan sólo en el lugar santo (Lev. 24: 5-9).

 

6 Así el sacerdote le dio el pan sagrado, porque allí no había otro pan sino los panes de la proposición, los cuales habían sido quitados de la presencia de Jehová, para poner panes calientes el día que aquéllos fueron quitados.

 

El pan de la proposición, literalmente "pan de la presencia" (BJ), simbolizaba a Cristo, el Pan vivo (Juan 6: 28-51).  Todo el alimento del hombre, tanto espiritual como temporal, se recibe tan sólo por la mediación de Cristo.  Tanto el maná como el pan de la proposición daban testimonio de que "no sólo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale de la boca de Jehová vivirá el hombre" (Deut. 8: 3).  Desde el punto de vista físico, cinco hogazas significaban poco para David y sus hombres.  Pero si Ahimelec "consultó por él a Jehová" y les dio también "provisiones", como testificó Doeg (1 Sam. 22: 10), tuvo más valor la visita al sacerdote.  También es posible que si David pensó en el significado del pan que había conseguido, esto pudo haberle ayudado a darse cuenta nuevamente de la verdad que la presencia de Dios estaría con él doquiera fuese.  David iba a necesitar una seguridad tal en los años de pruebas que le aguardaban.

 

8 Y David dijo a Ahimelec: ¿ No tienes aquí a mano lanza o espada?  Porque no tomé en mi mano mi espada ni mis armas, por cuanto la orden del rey era apremiante.

 

Engaño: Personas religiosas culpables,autocondenacion: Gn 12:13,20:2, 26:7, 27:19, 1 S 21:2, I Reyes 13:18, 2 Reyes 6:19, 10:18, Mt 26:74

 

22: 13 Y le dijo Saúl: ¿Por qué habéis conspirado contra mí, tú y el hijo de Isaí, cuando le diste pan y espada, y consultaste por él a Dios, para que se levantase contra mí y me acechase, como lo hace hoy día?

 

Celos humanos: los hermanos de José  Gn 37:4, Los hombres de Efrain Jue 8:1, El Rey Saul 1 Sa 18:8,  Los Trabajadores de la viña  Mt 20:12,  El hermano Mayor Luc 15:28

 

22.11 Y el rey envió por el sacerdote Ahimelec hijo de Ahitob, y por toda la casa de su padre, los sacerdotes que estaban en Nob; y todos vinieron al rey. 13 Y le dijo Saúl: ¿Por qué habéis conspirado contra mí, tú y el hijo de Isaí, cuando le diste pan y espada, y consultaste por él a Dios, para que se levantase contra mí y me acechase, como lo hace hoy día?

 

Ahimelec respondió: No negó Ahimelec la acusación de haber ayudado a David, pero sí negó haber sido desleal . Es obvio que Ahimelec quiso decir que había ayudado a uno a quien suponía en ese tiempo -ya fuera reciente o remoto- que era un representante honorable de Saul.

 

22.16 Sual dijo: Sin duda morirás, Ahimelec, tú y toda la casa de tu padre.17 Entonces dijo el rey a la gente de su guardia que estaba alrededor de él: Volveos y matad a los sacerdotes de Jehová; porque también la mano de ellos está con David, pues sabiendo ellos que huía, no me lo descubrieron.  Pero los siervos del rey no quisieron extender sus manos para matar a los sacerdotes de Jehová.

 

Lo que el rey pedía era algo espantoso.  Aun entre las tribus paganas de hoy día se considera que lo magico es sagrado y nadie se atreve a levantar la mano contra él. ¡Cuánto más debería haber respetado Saúl al siervo del Altísimo!

Injusticia: Gen 39:20,40:15, 1 sa 8:3, 1 Re 21:13,Isa 59:14,Mt 27:26, Hch 23:2 24:27

 

22.18 Entonces dijo Saul a Doeg: Vuelve tú, y arremete contra los sacerdotes.  Y se volvió Doeg el edomita y acometió a los sacerdotes, y mató en aquel día a ochenta y cinco varones que vestían efod de lino.

 

Doeg el edomita. Este descendiente de Esaú aparece como un hombre semejante a Saúl: celoso, resentido,  como que hubiera estado aguardando ansiosamente cualquier débil excusa para realizar los  propósitos de su mala naturaleza.  Al recibir permiso del rey de Israel, Doeg no vaciló en levantar la mano contra el siervo de Dios, sin tener en cuenta la sagrada investidura de Ahimelec y la de sus compañeros.  Ochenta y cinco hombres cayeron ese día ante la pasión de la codicia egoísta.  Es grande el contraste entre el profeso fervor religioso de Saúl que preservó vivo a Agag (cap. 15: 20) y su frenesí que lo hizo capaz de perpetrar este acto de barbarie sin paralelo en la historia judía.

 

Principio: la Administración puede ser personal, pero no privada porque afecta a otros.

 

Los inocentes sufrieron con los demas.  Quizá los habitantes de Nob no habían tenido nada que ver con el traslado a su ciudad del tabernáculo y de las familias sacerdotales (ver com. cap. 21: 1).  Sin embargo, la ira  insensata de Saúl arrasó a todo el pueblo.

Después de haber oído lo que hizo Doeg, David escribió el Salmo 52 (véase el sobrescrito de ese salmo).  Quedó asombrado de que  Doeg pudiera erguirse en arrogante antagonismo frente al plan de Dios en vez de descansar en su misericordia eterna. 

 

Comentario bíblico Adventista.

 

¿Que Aprendemos del relato ?

!Bendiciones Abundantes?

 

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