Los pensamientos habituales.
Los pensamientos forman el carácter.-
(Prov. 23: 7). Muchos pensamientos forman la historia no escrita de un solo día, y tienen mucho que ver con la formación del carácter.
Debemos vigilar estrictamente nuestros pensamientos, pues un pensamiento impuro deja profunda impresión en el alma. Si los pensamientos son puros y santos el hombre mejora ,Aceleran el pulso espiritual y aumentan el poder para hacer el bien. Y así como una gota de lluvia prepara el camino para otra en el humedecimiento de la tierra, un buen pensamiento prepara el camino para otro. MJ 142 (1901
Elijamos los temas de los pensamientos.-
Está al alcance de todos escoger los temas que han de ocupar los pensamientos y amoldar el carácter. Ed 127 (1903).
Se requiere un esfuerzo personal.-
Nadie, fuera de vosotros, puede controlar vuestros pensamientos. En la lucha por alcanzar las normas más elevadas, el éxito o el fracaso dependerá mucho del carácter, y de la manera como se disciplinen los pensamientos.
Si los pensamientos están bien controlados, como Dios ha enseñado que se controlen cada día, se fijarán en aquellos temas que nos ayudarán a obtener una mayor devoción. Si son correctos, entonces como resultado, las palabras también serán correctas; las acciones serán de tal carácter que traerán gozo y consuelo a las almas. NEV 114 (1886).
Hay que adiestrar los pensamientos.-
Los pensamientos deben ser disciplinados. Controlad la mente para que trabaje en la dirección debida, y según las órdenes emanadas de planes bien formados. De esta manera, cada paso que se dé será hacia el progreso, y ningún esfuerzo o tiempo se perderá en seguir ideas vanas y planes trazados al azar. Debemos considerar el blanco y el objeto de la vida, y siempre mantener en vista propósitos dignos.
Los pensamientos debieran disciplinarse cada día y mantenerse a punto, como la brújula al polo. Toda persona debiera tener blancos y propósitos, y luego hacer que cada pensamiento y acción contribuyan al cumplimiento de aquello que se ha propuesto. Los pensamientos deben ser controlados. Debe haber una firmeza de propósitos para realizar lo que se ha emprendido. NEV 114 (1886).
Cómo adiestrar los pensamientos.-
La verdadera disciplina de la vida depende de cosas pequeñas. El adiestramiento de los pensamientos es esencial. Ms 76, 1900.
El adiestramiento del corazón, el control de los pensamientos en cooperación con el Espíritu Santo, pondrá nuestras palabras bajo control. Esto es verdadera sabiduría, y le Asegurará paz mental y contentamiento. Habrá gozo en la contemplación de las riquezas de la gracia de Dios. Carta 10, 1894.
La única seguridad consiste en pensar correctamente.-
Necesitamos la constante conciencia del poder ennoblecedor de los pensamientos puros y de la influencia dañina de los malos pensamientos. Concentremos nuestros pensamientos en cosas santas. Que sean puros y verdaderos, porque la única seguridad de toda alma consiste en pensar correctamente. Tenemos que usar todos los medios que Dios ha puesto a nuestro alcance para el gobierno de los pensamientos y su cultivo. Tenemos que poner nuestras mentes en armonía con la suya. Su verdad nos santificará en cuerpo, alma y espíritu. Carta 123, 1904.
Una ley que rige pensamientos y sentimientos.-
Es una ley de la naturaleza que nuestros pensamientos y sentimientos resultan alentados y fortalecidos al darles expresión. Aunque las palabras expresan los pensamientos, éstos a su vez siguen a las palabras. MC 195 (1905).
Una nueva dotación de poder.-
Aquellos que consagran alma, cuerpo y espíritu a Dios, purificando sus pensamientos por la obediencia a la ley divina, recibirán continuamente una nueva dotación de poder físico y mental. El corazón suspirará por Dios, y elevará fervientes súplicas a lo alto por una clara percepción para discernir la misión y la obra del Espíritu Santo. No nos toca a nosotros usar al Espíritu, sino al Espíritu usarnos a nosotros, amoldando y formando cada facultad. COES 43 (1900). 691
MENTE,CARÁCTER Y PERSONALIDAD TOMO 2
Los Pensamientos y su influencia.